Según el informe publicado ayer por Greenpeace Galicia es la quinta autonomía con la costa más amenazada por el urbanismo y los vertidos. Greepeace contabiliza 43 puntos negros en el litoral de Galicia, doce de ellos en Pontevedra y entre ellos está, nuestro Ayuntamiento ¿alguien lo dudaba?
Desde aquí queremos tranquilizar a los chicos de Greenpeace porque los constructores van a ser unos niños buenos y van a dejar de edificar tanto. Si, si, ¿a que parece mentira?. No crean ustedes que van a dejar de construir porque los tipos de interés suban cada vez más (el importe medio de las hipotecas subió un 7% en abril) y así estos nuevos ricos que quieren tener un piso decente para vivir vayan a tener que pedir en la puerta de las iglesias para poder pagar las hipotecas. Esos que se jodan, tienen la desfachatez de pedir un piso de 70 m2, que gracia me va a hacer a mí cuando se peleen con Cabuxo y los demás indigentes para coger el mejor sitio para pedir; si ya estoy viendo el cartel "una limosna para un hipotecado, no llego a los 1400 € al mes e Ínsula no me quiere hacer caso" y, ah, perdón, me faltaba la típica coletilla en estos carteles "es mejor pedir que robar".
Van a dejar de construir tanto porque voy a mandarle una propuesta a la ministra de vivienda (ese ministerio que tanto a hecho por nosotros) para que se deje de tonterías de pisos de 30 metros. Que coño pisos. Lo que hay que construir es cuartos de baño un poco amplios (5 m2) y ya está. Tenemos todo allí, el resto es vicio. Cuando uno acabe de asearse pone un tabla encima del lavabo y ya sirve como mesa, la ducha puede servir como lavadora y colgador de ropa, para dormir la bañera, el mueble del lavabo lo utilizas como armario, encima del bidé pones el televisor y como sillón ya tienes uno con hidromasaje y aire acondicionado ¿qué mas quieres? Lo que yo digo, hay mucho vicioso, sra ministra; la gente pide por pedir. Hágame caso un cuarto de baño y ya está, no me diga que no es una idea para cagarse.
